jueves, 21 de enero de 2016

Hipertensión:

Hipertensión:

La hipertensión arterial es una patología crónica que consiste en el aumento de la presión arterial de forma continua o sostenida. Una de las características de esta enfermedad es que no presenta unos síntomas claros y que estos no se manifiestan durante mucho tiempo.

Causas:
Aunque todavía no se conocen las causas específicas que provocan la hipertensión arterial, sí se ha relacionado con una serie de factores que suelen estar presentes en la mayoría de las personas que la sufren.
  • Factores Genéticos: La predisposición a desarrollar hipertensión arterial está vinculada a que un familiar de primer grado tenga esta patología.
  • Sexo: Los hombres tienen más predisposición a desarrollar hipertensión arterial que las mujeres hasta que éstas llegan a la edad de la menopausia.
  • Edad:  tanto la presión arterial sistólica o máxima como la diastólica o mínima aumentan con los años y lógicamente se encuentra un mayor número de hipertensos a medida que aumenta la edad.
  • Sobrepeso y Obesidad: Los individuos con sobrepeso están más expuestos a tener más alta la presión arterial que un individuo con peso normal.
  • Vasculares: Entre el 2,5 y el 6 por ciento de los problemas relacionados con el riñón pueden influir en la aparición de la hipertensión arterial.
  • Endocrinológicas: Las causas endocrinas representan entre el 1 y el 2 por ciento. En éstas se incluyen desequilibrios hormonales exógenos y endógenos

Síntomas:
La mayoría de los casos de hipertensión transcurren sin que haya ningún síntoma, lo que hace muy difícil detectar esta enfermedad. Aunque hay síntomas específicos como las cefaleas que ayudan a detectarla haciendo que el paciente vaya al médico donde le toman la tensión. Debido a que no hay ningún síntoma, las personas pueden sufrir cardiopatía y problemas renales sin saber que tienen hipertensión arterial.
La hipertensión maligna es una forma peligrosa de presión arterial muy alta. Los síntomas incluyen:
  • Dolor de cabeza fuerte
  • Náuseas o vómitos
  • Confusión
  • Cambios en la visión
  • Sangrado nasal

Prevención:
  • Tener hábitos de vida saludable y, sobre todo,evitar el sobrepeso y la obesidad son los principales factores para prevenir la aparición de la hipertensión.
  • Los especialistas señalan que llevar una dieta sana y practicar ejercicio puede ayudar a que la población general esté exenta de sufrir esta patología.
  • En los casos en los que en la familia haya antecedentes de hipertensión este factor genético supone una llamada de atención adicional a que el paciente cuide esos hábitos de vida y vigile sus cifras de tensión arterial.

Consecuencias Posibles:
La hipertensión no tratada puede producir diversos daños orgánicos (el denominado daño de los órganos diana). Corazón, cerebro, riñones, vasos sanguíneos y ojos son particularmente vulnerables. Por lo cual puede causar:
  • Insuficiencia cardíaca.
  • Insuficiencia renal.
  • Infartos cerebrales o hemorragias.
  • La vista resulta dañada por la afectación de los pequeños vasos de la retina.
  • La alteración de la circulación arterial a nivel de los miembros inferiores puede producir claudicación.

Bibliografia:
http://clubdelhipertenso.es/index.php/consecuencias

Infarto de Miocardio:

Infarto de Miocardio:
El infarto de miocardio es una patología que se caracteriza por la muerte de una porción del músculo cardíaco que se produce cuando se obstruye completamente una arteria coronaria. Esta patología afecta tanto a hombre como a mujeres.

Causas:
 La principal causa es la obstrucción de las arterias coronarias. Esta obstrucción, interrumpe el suministro de sangre a las fibras del músculo cardíaco. Al dejar de recibir sangre estas fibras mueren de forma irreversible. El infarto de miocardio ocurre cuando un coágulo de sangre (trombosis coronaria) obstruye una arteria estrechada. Normalmente el infarto de miocardio no sucede de forma repentina.

Los principales factores de riesgo son:
  • La edad: a medida que avanza la edad hay más probabilidades de desarrollar algún grado de enfermedad coronaria.
  • El sexo: La enfermedad coronaria es más frecuente en hombres de mediana edad. Las mujeres pasan, como media, de diez a quince años más que los hombres, sin sufrir una enfermedad cardíaca, pero a medida que envejecen las mujeres alcanzan a los hombres. De hecho, las mujeres tienen más probabilidades de sufrir angina que los hombres. Por lo que se refiere a la edad, los índices de supervivencia por ataques cardíacos son similares en hombres y en mujeres, pero las mujeres jóvenes tienen un mayor riesgo de muerte por infarto que los hombres de la misma edad. Los motivos de esto no están claros.
  • Antecedentes familiares
  • El consumo de tabaco
  • Una dieta no saludable
  • El sedentarismo
  • La Hipertensión arterial
  • La diabetes
  • El sobrepeso
  • Consumo de alcohol y de drogas

Síntomas:
La descripción clásica del infarto es un dolor opresivo en el centro del pecho irradiado a brazos (sobre todo el izquierdo), cuello y espalda. Los síntomas habituales son:
  • Dolor torácico intenso y prolongado, que se percibe como una presión intensa y que puede extenderse a brazos y hombros, espada e incluso dientes y mandíbula. Un dolor similar al de la angina de pecho
  • Dificultad para respirar.
  • Sudoración
  • Palidez
  • Mareos en el 10% de los casos.
  • Pueden aparecer náuseas, vómitos y desfallecimiento.
  • Unas veces se manifiesta con dolor en la parte alta del abdomen, dificultad para respirar, ganas de vomitar y pérdida de conocimiento.

Prevención:
  • Dejar de Fumar
  • Llevar una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras, legumbres y cereales.
  • Realizar ejercicio físico aeróbico.
  • Evitar las bebidas alcohólicas.
  • Beber el suficiente líquido (entre 1.5 y 2L)
  • Revisiones periódicas.

Consecuencias Posibles:

  • Si el infarto agudo de miocardio es muy extenso, es posible sufrir de por vida insuficiencia cardíaca, a veces con congestión pulmonar.
  • Si el infarto agudo de miocardio es de pequeña extensión, se puede llevar una vida normal, eso sí, controlando los factores de riesgo para evitar un nuevo infarto.
  • Trastornos de ritmo cardíaco.
  • Insuficiencia mecánica
  • Como consecuencia del infarto también se pueden producir, aunque con menor frecuencia, las siguientes situaciones: la rotura cardíaca, un aneurisma ventricular (dilatación de una zona del corazón que provoca un peor funcionamiento de este), el tromboembolismo pulmonar (se forma un coágulo de sangre que viaja hasta el pulmón, donde impide la llegada de flujo sanguíneo) o la pericarditis (inflamación de la cubierta del corazón).

Bibliografia:

miércoles, 20 de enero de 2016

Ictus

Ictus:
El ictus es una enfermedad cerebrovascular que afecta a los vasos sanguíneos que suministran sangre al cerebro. También se la conoce como Accidente Cerebro Vascular (ACV), embolia o trombosis. Los dos últimos términos, no obstante, se refieren más a bien a distintas causas del ictus. Un ictus ocurre cuando un vaso sanguíneo que lleva sangre al cerebro se rompe o es taponado por un coágulo u otra partícula. La consecuencia es que las células nerviosas del área del cerebro afectada no reciben oxígeno, por lo que no pueden funcionar y mueren transcurridos unos minutos.

Causas:
  • Edad avanzada: Pasados los 55 años, cada década vivida dobla el riesgo de padecer un ictus. No obstante, esto no quiere decir que las personas jóvenes no sufran el problema.
  • Sexo: Se producen, más o menos la misma cantidad de ictus en los dos sexos. No obstante, más de la mitad de las muertes son en mujeres.
  • Herencia familiar:  el riesgo de sufrir un ictus es mayor si alguna persona de la familia lo ha padecido.
  • Haber sufrido un ictus recientemente: Una vez sufrido un accidente cerebrovascular las posibilidades de padecer otro aumentan considerablemente.
  • Tener la presión sanguínea elevada.
  • Fumar.
  • Padecer diabetes mellitus.
  • Sufrir enfermedad de la arteria carótida.
  • Presentar enfermedad cardiaca.
  • Sufrir ataques isquémicos transitorios.
  • Contador de glóbulos rojos alto.
  • Consumir alcohol en exceso.
  • Consumo de drogas.
  • Además si existe obesidad hay mayor riesgo.

Síntomas:
En general, los ictus son de inicio súbito y de rápido desarrollo, y causan una lesión cerebral en minutos. En función del área del cerebro afectada pueden producirse muchos síntomas diferentes:
  • Adormecimiento o debilidad repentina en la cara, el brazo o una pierna, especialmente en uno de los lados del cuerpo.
  • Confusión repentina, dificultad para hablar o para entender.
  • Repentina dificultad para andar, mareo, pérdida de equilibrio o coordinación.
  • Problemas repentinos para ver en uno o los dos ojos.
  • Dolor de cabeza repentino sin que se conozca la causa.

Cuando el ictus afecta a la región izquierda del cerebro, la parte afectada será la derecha del cuerpo (y la izquierda de la cara) y se podrán dar alguno o todos los síntomas siguientes:
  • Parálisis del lado derecho del cuerpo.
  • Problemas del habla o del lenguaje.
  • Estilo de comportamiento cauto, enlentecido.
  • Pérdida de memoria.

Si por el contrario, la parte afectada es la región derecha del cerebro, será la parte izquierda del cuerpo la que sufrirá estos problemas.

Hay dos tipos de ictus:
  • Ictus Isquémico Los vasos están obstruidos dentro. Los coágulos causantes del problema se denominan trombos cerebrales o embolismo cerebral. Causado por una obstrucción del vaso sanguíneo.
  • Ictus hemorrágico: el vaso se rompe, lo que provoca que la sangre irrumpa en el cerebro. Al entrar la sangre comprime el tejido cerebral. Existen dos subtipos de este tipo de ictus, la hemorragia intercerebral y la subaracnoidea. Sucede cuando se rompe un vaso sanguíneo débil.

Prevención:
La Sociedad Española de Neurología recomienda una serie de hábitos saludables para evitar sufrir un ictus:
  • Llevar una dieta rica y saludable
  • Realizar ejercicio de forma habitual.
  • No fumar.
  • Moderar el consumo de alcohol.
  • Llevar un control de la tensión arterial de forma regular.

Tratamientos:
El tratamiento es distinto si el ictus es debido al bloqueo de un arteria o a causa de la ruptura de un vaso. En algunos casos es necesaria una operación.

Secuelas posibles:
Pérdida de fuerza, inmovilización de de un lado del cuerpo, trastornos del lenguaje (incapacidad de comprender y/o emitir ningún tipo de lenguaje adecuado, afasia; alteración del habla que se manifiesta a la hora de articular palabra, disartria ;o incapacidad de emitir ninguna palabra, mutismo), trastornos visuales (pérdida de visión de la mitad del campo visual, hemianopsia), trastornos en la sensibilidad (hormigueo, falta de sensibilidad…), la espasticidad ( trastorno motor del sistema nervioso en el que algunos músculos permanecen contraídos), dolor central ( dolor superficial quemante o punzante que aumenta al tacto, con el agua o con los movimientos) e incontinencia urinaria.

 También pueden aparecer problemas psicológicos como la depresión, la ansiedad, la labilidad emocional (pasar del llanto a la risa sin motivo alguno, llorar o reírse sin causa aparente), la apatía, la irritabilidad y la falta de consciencia de las secuelas del ictus.



martes, 19 de enero de 2016

Venas, Arterias, Pulso, Presión Sanguínea y Ejercicio

Venas y Arterias:

El tejido de las arterias está diseñado para facilitar un transporte de sangre rápido y efectivo a todos lo tejidos del organismo. Las arterias le llevan a las células el oxígeno. Las capas externas de las arterias se componen de tejido conectivo, las capas medias están compuestas de musculatura lisa y las capas más internas, en contacto con la sangre, están formadas de tejido endotelial.

La estructura de las venas es parecida a la estructura de las arterias pero la capa muscular es más débil, no mantiene un tono tan firme como en las arterias y no tienen la misma capacidad de contracción. Debido a este menor tono las venas son mucho más flexibles. Otra diferencia estructural muy destacada es la existencia de válvulas en el interior que dificultan el retroceso de la sangre. Las venas recogen la sangre después de su paso por los tejidos.

Las arterias son las encargadas de transportar la sangre con oxígeno por el cuerpo desde el corazón a los tejidos que lo componen. Por el contrario, las venas llevan sangre que tiene poco oxígeno pero compuesta de dióxido de carbono desde esos tejidos al corazón.


Tipo de vaso
Diámetro (mm)
Función
Aorta
25
Amortiguación del pulso y distribución
Arterias elásticas
1-4
Distribución
Arterias musculares
0.2-1.0
Distribución y resistencia
Arteriolas
0.01-0.02
Resistencia (regulación flujo/presión)
Capilares
0.006-0.010
Intercambio gases/nutrientes/desechos
Vénulas
0.01-0.02
Intercambio, recogida y capacitancia
Venas
0.2-5.0
Capacitancia (volumen sanguíneo)
Vena cava
35
Recogida



¿Qué es la presión sanguínea?:

Es la tensión ejercida por sangre circulante sobre las paredes de los vasos sanguíneos, y constituye uno de los principales signos vitales. La presión de la sangre disminuye a medida que la sangre se mueve a través de arterias, arteriolas, vasos capilares, y venas; el término presión sanguínea generalmente se refiere a la presión arterial.


¿Qué es el pulso?:

En medicina, el pulso de una persona es la pulsación provocada por la expansión de sus arterias como consecuencia de la circulación de sangre bombeada por el corazón. Se obtiene por lo general en partes del cuerpo donde las arterias se encuentran más próximas a la piel, como en las muñecas o el cuello e incluso en la sien. Podemos decir que el pulso se define como la onda de sangre creada por la contracción del ventrículo izquierdo del corazón y es útil para estimar la frecuencia cardíaca. La frecuencia cardíaca normal es:

  • Recién nacido: Frecuencia cardíaca media 130 con un rango o intervalo de 80-180 x’
  • 1 año: Frecuencia cardíaca media: 120 con un rango o intervalo de 80-140x’
  • 10 años: Frecuencia cardíaca media: 70 con un rango o intervalo de 50-90x’
  • Adolescentes: Frecuencia cardíaca media: 75 con un rango o intervalo de 50-90x’
  • Adultos: Frecuencia cardíaca media: 80 con un rango o intervalo de 60-100x’
  • Ancianos: Frecuencia cardíaca media: 70 con un rango o intervalo de 60-100x’

Cuando la frecuencia cardíaca se encuentra fuera de los rangos normales tenemos:

  • Taquicardia: para cantidad de pulsaciones mayores a los límites superiores (para cada caso) de los intervalos normales antes detallados.
  • Bradicardia: para cantidad de pulsaciones menores a los límites inferiores (para cada caso) de los intervalos normales antes detallados.


¿Cómo afecta el ejercicio al sistema circulatorio?:

Quienes practican actividades físicas con frecuencia tienen un riesgo menor de padecer de enfermedades del corazón y problemas de la tensión y el colesterol. Los ejercicios del tipo cardiovascular como el footing, caminar, hacer natación, el fitness o las clases aeróbicas mejoran la oxigenación de los órganos lo que a su vez optimiza su funcionamiento. Al mismo tiempo esta actividad mejora la frecuencia cardíaca bombeando más sangre a todo nuestro cuerpo por lo que la circulación enseguida se ve favorecida.Esto hace que las paredes arteriales también se fortalezcan. Además con un plan de ejercicio y una adecuada alimentación se reduce la presencia de grasa en nuestro cuerpo por lo que las arterias están más limpias y tienen una menor posibilidad de obstruirse.